Brian y Elizabeth Bruxvoort

Una vez terminadas todas las pruebas de diagnóstico, Brian sube a la pequeña cabina de su avión. Comprueba todos los controles por última vez antes de estar listo para navegar por el incierto clima de Alaska. El vuelo de hoy está formado por pastores de aldea que se dirigen a un retiro de discipulado. En un estado con más de 200 aldeas sin sistema de carreteras, la aviación es la única forma de desplazarse eficazmente a través de Alaska, y a menudo es la única forma en que las pequeñas iglesias de las aldeas tienen alguna conexión con una comunidad religiosa más amplia.

Brian y Elizabeth Bruxvoort trabajan en colaboración con el Centro de Reparación de Aviación de la Misión, donde proporcionan transporte a pastores, misioneros, campamentos bíblicos y otros ministerios que llevan la esperanza de Cristo a pueblos remotos de Alaska. Tanto si transportan pasajeros como si prestan servicio de mantenimiento a los aviones de otros misioneros o pastores, el objetivo de los Bruxvoort es ser las manos y los pies de Jesús en todo su trabajo.