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Parece una parábola moderna: invitados inesperados, y de alguna manera la comida fue suficiente para todos. 

Parece una parábola moderna.

La Iglesia Reformada de Preakness (PRC) en Wayne, Nueva Jersey, se preparaba para una noche ajetreada. Los miembros de la banda de la iglesia, Berdan Hall, se estaban preparando para el Coffeehouse de la PRC, una noche de micrófono abierto para que los miembros de la iglesia y de la comunidad compartan sus dones musicales con los demás. Como no querían parar a cenar, habían traído comida para compartir con sus compañeros de banda mientras conectaban los micrófonos y preparaban las luces.

Sin embargo, pronto empezaron a llegar los músicos invitados de la comunidad, listos para hacer sus propias pruebas de sonido antes del espectáculo. Era temprano y ninguno de ellos había comido. Los miembros de Berdan Hall se miraron con preocupación; no habían previsto que hubiera tanta gente para cenar.

"De alguna manera, aunque estábamos casi seguros de que no teníamos suficiente, pudimos compartir nuestra comida con cerca de 35 personas, e incluso nos sobró", dice Glenn O'Connell, anciano del PRC y cofundador de Berdan Hall. "Lo llamamos cariñosamente un recuento moderno de la historia de los panes y los peces".

Esta historia es sólo uno de los muchos casos en los que O'Connell ha visto a Dios obrar en el Coffeehouse del PRC, que ayuda a dirigir junto con el cantante principal de Berdan Hall, Arno Miller. Los eventos trimestrales de la cafetería ofrecen a los músicos la oportunidad de compartir la adoración con otros fuera de un servicio de adoración convencional.

"La cafetería está dirigida por el PRC, pero siempre ha sido un asunto comunitario", dice O'Connell, que se encarga del sonido y las luces de cada espectáculo. "Acogemos a artistas no sólo de nuestra congregación, sino también de otras iglesias y de la comunidad en general".

El PRC Coffeehouse se puso en marcha hace poco más de un año, y O'Connell dice que cada evento ha atraído a más de 100 personas a la iglesia, ya sea como músicos, miembros del público u otros actos variados de las iglesias cercanas y de la comunidad. Cada noche se presentan al menos cinco actuaciones de grupos diferentes, entre ellos Berdan Hall.

La congregación del PRC apoya sin reservas los esfuerzos de O'Connell y Miller, y considera que la cafetería es una forma única de compartir sus dones y de ser acogidos por la comunidad.

"Nuestra iglesia siempre ha considerado que la ayuda a la comunidad es parte integral de nuestra misión como congregación de creyentes", dice O'Connell. "Estos eventos son una de las innumerables maneras en que el PRC trabaja para facilitar la adoración con otros en la comunidad, y compartir la Palabra de Dios.

"Para mí, lo más emocionante es que podemos llevar a la gente a nuestro espacio de la iglesia para mostrar una expresión tangible de nuestro amor por Dios, la música y los demás".

O'Connell y el equipo de la cafetería planean continuar con estos eventos en el futuro inmediato, para que aquellos que no asisten regularmente a la iglesia tengan un lugar seguro donde puedan encontrarse o conectarse con Dios.

"A nuestros ojos, este evento no es simplemente un espectáculo musical, sino una oportunidad para que todos los participantes entren en contacto más estrecho con Dios mediante el uso de los talentos que les ha dado", dice.