Después de asistir al campamento de día SpringHill el pasado verano, más de 100 niños tomaron la decisión de seguir a Cristo. Muchas de sus familias vienen ahora a adorar a la iglesia que patrocinó el campamento: el campus de Beecher, Illinois, de la Iglesia de la Fe (RCA) en Dyer, Indiana.
El campamento ha permitido a Faith Beecher tender un puente a la comunidad, especialmente a la escuela secundaria de al lado.
Después de asistir al campamento de día SpringHill el pasado verano, más de 100 niños tomaron la decisión de seguir a Cristo. Muchas de sus familias vienen ahora a adorar a la iglesia que patrocinó el campamento: el campus de Beecher, Illinois, de la Iglesia de la Fe (RCA) en Dyer, Indiana.
El campamento ha permitido a Faith Beecher tender un puente a la comunidad, especialmente a la escuela secundaria de al lado.
La relación de la iglesia con Beecher Junior High se desarrolló de forma natural, ya que muchas personas de la congregación están relacionadas con la escuela: profesores, entrenadores, un conserje, el asistente administrativo del director, antiguos miembros del consejo escolar y muchos estudiantes.
"El campamento de día SpringHill 2013 se celebró en nuestras instalaciones, justo al lado de la escuela secundaria", dice el pastor Nathan Prairie. Con 115 niños, las instalaciones no daban abasto. Decidieron dirigirse al personal de la escuela para ver si estaban dispuestos a dejar que la iglesia alquilara el espacio para una semana de campamento. "Vieron el valor para la comunidad en general y nos dieron el uso completo de sus instalaciones de forma gratuita", dice Prairie.
Ahora que el campamento podía acoger a más niños, la congregación amplió su promoción. "Como mucha gente se desplaza al culto desde otros pueblos rurales, también pedimos a las escuelas primarias de otros pueblos cercanos que distribuyeran folletos del SpringHill Day Camp. Aceptaron enviarlos a casa con los niños".
El SpringHill Day Camp de 2014 se celebró durante una semana en junio, de lunes a viernes, de nueve a cuatro, "una gran comodidad para los padres que trabajan", dice Prairie. Asistieron 157 niños que habían completado desde el jardín de infancia hasta el cuarto grado, y más del 80% de ellos procedían de fuera de la congregación. El coste de asistir al campamento era de $169 por niño, y Prairie dice que la familia Faith Beecher aportó suficiente dinero para las becas de la mitad de los niños.
Las actividades del campamento incluían un rocódromo, una escalera de cuerda, una red de cuerda, un columpio gigante, un tobogán de agua, paintball, tiro con arco, puenting inverso, cuerda floja, teñido de corbatas y mucho más.
A través de representaciones en grupo grande, cantos y bailes, y en grupos pequeños según la edad, con historias bíblicas y testimonios, los niños aprendieron cómo es tener una relación con Jesús. "La memorización de versículos bíblicos y el aprendizaje de la oración fueron también partes clave de esos momentos en el grupo pequeño", dice Prairie.
"El campamento fue una gran oportunidad para evangelizar, pero también para desarrollarnos como iglesia en el área del discipulado. Ha sido nuestro objetivo llegar fuera de las paredes de la iglesia, sirviendo intencionalmente a las familias de Beecher y las comunidades circundantes con el amor de Jesús, revelando que él es la razón de la vida. No podría estar más agradecido por la forma en que la gente reunió su tiempo, talento y recursos financieros.
"Si el Señor quiere, 2015 será nuestro tercer año de campamento de día SpringHill en Beecher.
"Es nuestra oración que, como iglesia local, hagamos todo lo posible para construir la confianza y la relación con estos niños para que sus decisiones maduren hacia un estilo de vida de seguimiento de Cristo".
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